Por Lily Plaza, iniciativa Humedales Costeros y proyecto Ojos Costeros, Llolleo.
Jornada de conciencia ambiental y arte se vivió en el humedal Ojos de Mar, específicamente en la Playa de Llolleo, ubicada al sur de la comuna de San Antonio. Este ambiente posee una extensión de 1,1 km de arenas volcánicas donde desemboca el Río Maipo, y que es hábitat de miles de aves migratorias y residentes que hacen de este lugar un sitio prioritario para la biodiversidad.
Como es de costumbre, la Ong Ojos de Mar, organizó hace algunos días la 1era Limpieza del año 2022, en la que participaron más de 70 personas de todas las edades, quienes se desplegaron por la playa con sacos y guantes, retirando los residuos que encontraban a su paso. Desde micro plásticos, juguetes, bolsas, botellas hasta colchones y sillones, devueltos por las fuertes marejadas y crecidas del río.
Esta jornada además tuvo una sorpresa especial para los asistentes: la presentación de una escultura de Pilpilén, realizada por el escultor local Rodrigo Navarrete, quien trabajó por más de 4 meses en el desarrollo de esta obra de 2,3 mts de alto, financiada por la iniciativa Humedales Costeros, que promueve el cuidado de estos ambientes y las aves playeras en la costa árida-semiárida del Pacífico Sudamericano
La escultura consiste en una estructura de fierro con forma de Pilpilén, hueca por dentro, la cual fue rellenada de manera colaborativa con los asistentes, quienes clasificaron los desechos recolectados según colores y tipos de material, dando vida a “Anacleta”, nombre con el que fue bautizada por parte de la organización.
Los asistentes valoraron la jornada, señalando la importancia de generar encuentros donde además de realizar acciones directas de resguardo medioambiental, se aprende de las especies y se reflexiona sobre el comportamiento que tenemos con nuestro entorno, comentó Erik, vecino de Barrancas. Amelia de solo 9 años señaló “Me gusta venir hacer esto de sacar basura de la playa, lo que más encontré fueron botellas y más botellas pero ahora son parte del cuerpo del Pilpilén”.
Anacleta visitará diversos puntos de la comuna para concientizar sobre la importancia de reducir el consumo de plásticos y cómo estos afectan a la biodiversidad marina, en especial a las aves como el pilpilén omún, especie que nidifica cada año en la Playa de Llolleo.
Actualmente la escultura se encuentra en el Centro Cultural de San Antonio donde los visitantes pueden fotografiarse junto a ella e interiorizarse sobre la actividad. A final de mes Anacleta estará presente en el Seminario de empoderamiento comunitario para la protección de Humedales a realizarse el 24 junio en San Antonio.
Ana Laura Galarza, gestora de la jornada artística, señaló “estamos muy contentos como equipo, esta escultura tuvo alcance a nivel nacional, se ha difundido a través de medios y redes sociales desde Antofagasta hasta Chiloé. Agradecemos la invitación al Proyecto Ojos Costeros, a Liliana Plaza por la idea original y a la gente por motivarse y participar. Creemos que el arte es una herramienta poderosa para sensibilizar y concientizar a todos con respecto a nuestras formas de consumo y sus afectaciones a la naturaleza y a todos los seres vivientes”.
Si bien la idea está inspirada en otras obras de impacto visual sobre el uso de plásticos, es la primera vez que se realiza con aves de la zona y se invita a los participantes a co-crear una obra que conjuga arte comunitario y acción climática. La idea es poder vaciar y rellenar la escultura en otras jornadas de limpieza que se realicen en el litoral y en regiones donde nidifica el Pilpilén.
La escultura es parte del proyecto “Ojos Costeros, empoderamiento local para la protección de humedales en el Litoral Central”, que con diversas actividades han visibilizado y educado entorno a la protección de estos ecosistemas costeros durante 16 meses, a través de guías de exploración para humedales, jornadas de gestión ambiental para ONGs, encuentros docentes, propuestas didácticas para la educación ambiental, georeferenciación de humedales no protegidos, obras de teatro, murales entre otras actividades; lideradas por integrantes de la Ong Ojos de Mar y socios de la Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile (ROC)
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