El humedal marino de Chamiza se encuentra en la comuna de Puerto Montt y congrega a cientos de aves que visitan o residen a lo largo del año. En este humedal se encuentra la desembocadura del río Chamiza, el cual recorre 35 km desde su origen (Lago Chapo) hasta el mar. Recientemente, el humedal de Chamiza fue declarado Sitio de Importancia Internacional por la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras (RHRAP) por albergar a más del 10% de la población biogeográfica del zarapito de pico recto (Limosa haemastica). Esta nueva designación es el puntapié inicial hacia un trabajo de conservación local y colaborativo, en donde diferentes actores locales podrán hacerse participes de su conservación.
La actividad se llevó a cabo en terreno, en el área de ingreso al humedal, entre las localidades de Coihuín y Chamiza. La salida consistió en una jornada de avistamiento de aves, en donde previamente se conversó e introdujo al mundo de estos animales y sus hábitats, señalando la importancia de su conservación y los problemas a los que se enfrentan las aves que habitan en estos ecosistemas, principalmente en el humedal de Chamiza. Aquí, los y las estudiantes junto a la directora Ana María Ramos y los profesores y profesionales Marcela Parra, Carmen Bárcena, Gustavo Osses, Elena Rival, Francis Jipoulou y Cristian Torres, pudieron observar y reconocer las aves que se encontraban en su entorno, entre las cuales pudieron identificar a aves playeras como el pitotoy grande y el queltehue común, como también otras aves acuáticas como la garza chica, pato jergón grande y pato real. Posterior al avistamiento de aves, los y las alumnas realizaron una actividad artística, en la que pudieron dibujar y aprender a retratar a las aves avistadas y presentes en el humedal. Sumado a lo anterior, los y las participantes pudieron presenciar directamente algunas de las amenazas más comunes que afectan al humedal, como es la contaminación y la presencia de perros sin dueño.
La profesora jefe del curso, Marcela Parra, nos indica que ”como profesora de los niños y niñas que tuvieron la maravillosa experiencia de visitar el Humedal Marino Chamiza-Coihuín, puedo decir que para ellos significó un aprendizaje activo para su vida y su día a día; por el contacto físico que tuvieron con la naturaleza y el arte como también para el desarrollo de su pensamiento crítico, esta experiencia de conocer en vivo lo que es un humedal y lo que significa no es solo para ellos, si no que también será transmitido a la familia”.
Por otra parte, Ana María Ramos, directora de la escuela nos comenta “la salida al humedal por los estudiantes fue definida como maravillosa, fue un encuentro con la naturaleza y las aves. Estar inserto en su hábitat produce prudencia y respeto. Apreciar la belleza de estas aves y describir sus características plumaje le proporciona un aprendizaje inolvidable y significativo. Agradecer de haber tenido la oportunidad de estar con el tercero básico de la escuela Rotario y de tomar conciencia de proteger este bello lugar“.
Finalmente, la profesional de apoyo en gestión y coordinadora ambiental de la escuela, Francis Jipoulou, nos expresa “la actividad fue muy significativa para los niños y niñas, conocer un humedal en vivo, avistar y reconocer aves, manejar por primera vez un instrumento como el telescopio o los binoculares, puedo asegurar que les quedó grabado en su mente y corazón. En lo personal fue una experiencia muy gratificante y de mucho aprendizaje. El tener la posibilidad que mis sentidos experimenten sensaciones que nos da la naturaleza fue experimentar quietud y paz interior”.
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